Fotohistorias

jueves, 10 de junio de 2010

El Zapato de Estambul



Cuando se puso aquel zapato y se abrochó la trabilla, antes de dar el primer paso, pudo sentir los caminos de su antiguo dueño. En las suelas notó increíbles carreras por las callejuelas de la parte antigua, en las costuras todavía estaban las vibraciones debidas a multitud de goles marcados en el patio de la mezquita y alguna patada traviesa había dejado mella en el cuero marrón. Sin saberlo, había elegido uno de los zapatos mágicos de los que su madre le hablaba cada vez que iban a la zapatería de usado. Había elegido un zapato con memoria.
Tras el shock inicial echó a andar hacia el parque, alegre, con el gesto orgulloso, consciente de que, por primera vez en su vida, sus aventuras serían recordadas.

2 comentarios:

  1. wn! porque mierda me emocionas de esta forma! me dedicaste un viejo comunista que es la cancion mas hermosaaaaaaaaa....y mas visceral por la mierda, por que eeres asi y estas tan lejos....tengo que abrazarte aunque tenga que llegar a un pais que no de mis favoritos...
    te adoro wn! y muchisisisisisiiiiiiiiiiiimo!

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  2. No me importaría nada ponerme unas sandalias usadas por Ramsés y meterme de lleno en las aventuras del Ejipto faraónico,para ir empezando en esto de los zapatos usados.....
    A las nubes blancas nos gusta vivir diferentes aventuras cada día.

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